Entre 2016 y 2017, el escritor, periodista y militante se reunió en su casa, conocida como «El tugurio», con familiares, amigos/as de sus poetas más admirados y esos encuentros fueron compilados por la periodista Mariana Dufour en este texto.

Entre 2016 y 2017, el escritor, periodista, guionista y militante Osvaldo Bayer se reunió en su casa, conocida como «El tugurio», con familiares, amigos o amigas de sus poetas más admirados y esos encuentros fueron compilados por la periodista Mariana Dufour en el libro «Revolución es la palabra», que fue presentado este miércoles en el Centro Cultural Kirchner en cita que se convirtió en un homenaje a quien transformó su palabra en herramienta de lucha.
Pasadas las 18.30, Esteban Bayer, hijo del autor de «La Patagonia Rebelde», subió al escenario con Adolfo Pérez Esquivel, Premio Nobel de la Paz y Presidente Honorario del Servicio Paz y Justicia (Serpaj), quienes inauguraron el espacio para recordar el trabajo, la militancia y el compromiso de Bayer (1927-2018).
Pérez Esquivel lo definió como «un anarquista con alegría de la vida que compartió siempre el andar de los pueblos» y señaló que «partió pero está presente a través de su testimonio de vida. Su testimonio nos tiene que guiar en la lucha por la liberación», expresó al inaugurar la ronda de discursos, lecturas y música.
«Su palabra era su herramienta de lucha con la que cuestionaba la soberbia del poder, seducía, formaba conciencia y recorría el país», señaló por su parte Esteban, el hijo del escritor. Además el también periodista remarcó que Bayer aprovechó esa palabra «para defenderse en decenas de juicios y los ganó a todos».
«Con la palabra recibió a los protagonistas de este libro», afirmó al hacer referencia a los encuentros semanales que tuvieron lugar en esa casa del barrio de Belgrano por la que cada semana durante dos años pasaron Raúl Zaffaroni y Cristina Banegas para homenajear a Juan Gelman; Stella Calloni; Marian Farías Gómez o Beatriz Pichi Malen y Lorenzo Pinsen para hablar de la palabra originaria. También estuvieron Miguel Ángel Estrella; Teresa Parodi y Víctor Heredia, como discípulo de Atahualpa Yupanqui, entre otros.