Axel Kicillof entregó más viviendas en Rauch: «Vinimos a construir, no a dinamitar nada»

La entrega fue de las primeras 22 casas de las 40 previstas. Las unidades fueron financiadas con aportes del Instituto de la Vivienda.

El encuentro se realizó en el lugar donde se levantaron las primeras 22 casas de las 40 previstas. Las unidades fueron financiadas con aportes del Instituto de la Vivienda.

Al respecto, el intendente Maximiliano Suescun destacó y agradeció el trabajo mancomunado con el Gobierno Provincial, no obstante de pertenecer a diferentes signos políticos.

Asimismo resaltó que prácticamente la totalidad de las casas fueron hechas «con manos de Rauch», describiendo el circuito virtuoso que se trazó a partir de la utilización de mano de obra, empresas, producciones todas locales y parafraseó a Axel Kicillof: «cada peso que se gasta aquí en el municipio, no es sólo un peso sino que se multiplica».

Además, el Gobernador remarcó la serie de proyectos en los que viene trabajando su gestión junto con la provincia en materia de hábitat: «es un proceso ininterrumpido, generamos una sinergia con el pueblo, trabajando en conjunto porque las cosas que parecen imposible se hacen realidad», sentenció. 

Por su parte, el  Ministro de Hábitat de la Provincia Agustin Simone, que habló sobre las proyecciones de vivienda en toda la provincia y adelantó: «queremos iniciar 10 mil viviendas todos los años, hoy estamos en 12.500». En ese sentido, el funcionario señaló que desde la gestión se plantearon «un piso de que en todos los municipios por lo menos se estén construyendo 100 casas». 

Ya en el turno del gobernador Axel Kicillof,  aprovechó para direccionar su mensaje como respuesta a la oposición: «en los canales porteños se la pasan machacando que el Estado es malo, y que el mercado soluciona todos los problemas. Eso puede servir para algunas familias, pero los grandes problemas de la provincia no se resuelven con la mano invisible del mercado, al contrario esos problemas muchos surgen de esa mano», analizó y remarcó: «con el mercado solo no es suficiente», recordando las inversiones en obra pública.

No obstante expresó: «es un poco ridículo pensar que hay una confrontación entre el mercado y el estado. Para que alguien pueda tener cualquier tipo de producción, hacen falta rutas, caminos, aeropuertos, combustible, eso en los países como el nuestro, históricamente el motor de desarrollo fue el Estado y cuando hubo problemas es porque se retiró», dijo: «hay que reflexionar de cara a una elección, en el interior no tenemos todo resuelto pero hemos invertido como nunca en infraestructura escolar» y destacó las obras en Rauch, municipio que no es oficialista.

«Es cuestión de hacer todos los días, tenemos para el interior seguridad, viviendas, universidades, seguimos invirtiendo en salud, educación, tenemos un modelo productivo y de inclusión», enfatizó Kicillof al tiempo que advirtió: «piensen cual es el modelo que necesitamos que funcione en cada uno de municipios», apuntando a la oposición sobre la cual refirió: «venden espejitos de colores  en los canales de la capital, gritan mucho y andan muy enojados pero cuando les tocó gobernar la Nación y la Provincia no hicieron nada».

En el último tramo de su discurso, apuntó sin nombrarlo, a las críticas del libertario Javier Milei: «veía un recorte donde un candidato a presidente decía cero obra pública y decía que iba a dinamitar el estado, y la otra (por Patricia Bullrich) a semidinamitar, y cuando dicen que van a hacer eso, me pregunto qué piensan dinamitar?», lanzó el mandatario provincial y redobló en su conclusión: «lo que hay que hacer es seguir construyendo, y nosotros venimos a construir no vinimos a dinamitar nada».